Médicos de la Clínica Internacional de Especialidades en Mexicali, Baja California, cortaron la oreja de un recién nacido al haberse quedado sin luz durante la cesárea, comunicaron los padres del recién nacido.
Karla Araceli Urizandi Martínez de 19 años, madre del menor, ingresó al hospital a las 11:00 horas de la fecha señalada y era a las 12:40, cuando ya estaba bajo los efectos de la anestesia, el edificio médico se quedó sin energía eléctrica, por lo que los cirujanos usaron las lámparas de sus celulares para poder terminar con la cirugía, a pesar de la negación de la madre, quién estaba indispuesta a ser operada en ese momento.
“No me quiero operar así, sin luz, tengo mucho miedo. No me quiero morir”, expuso la madre a los médicos.
Los padres del bebé, denunciaron los hechos en donde detallaron que el médico David Santoyo le dijo a la paciente que sí se realizaría la operación, incluso que el doctor salió a avisarle al padre del bebé, que pese a la falta de luz en el quirófano, ellos disponían de una subestación de energía para abastecerse.
El padre no fue admitido dentro del quirófano para poder presenciar el nacimiento. De acuerdo con la pareja, el médico fue antes de concluir la cesárea y suturar a la madre.
Gracias a un video del alumbramiento tomado por otro doctor, se observa al bebé llorar y sangrar tras ser acostado en una sábana.
Tras un largo rato sin saber de su bebé, fue un doctor el que dijo a los padres que el niño nació con un tumor no canceroso y por eso le reconstruyeron la oreja, ahorrándoles un monto de 30 mil pesos.
Sin embargo, Karla Araceli, mencionó que en los ultrasonidos previamente realizados en ningún momento se detectó algún problema en el menor.
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